Cursor by www.Soup-Faerie.Com Crónicas de una hoguera: Sobre nubes, almohadas y castillos de arena

Crónicas de una hoguera

martes, mayo 06, 2008

Sobre nubes, almohadas y castillos de arena


Todo fue diferente, tendría que serlo. Al cerrar la puerta de madera me invadió un sentimiento de vacío como pocas veces había sentido; era la impaciencia por contestar a la vida. Por un segundo, todo el universo se centraba en una mirada, una mirada que no existe, una mirada que sueño y pienso cada minuto, una mirada viva y cómplice.

Como tantas otras veces, sólo el espacio para rozar su aliento nos separaba, y era tan grande el abismo que el vértigo me ahogaba hasta apretar con sus manos mi garganta.

  • ¿Cómo estás? Te siento muerto.
  • Ahora mucho mejor, no te preocupes por mí.
  • Cómo quieres que no lo haga? ¡Todavía tienes sangre en las manos!
  • No me mires, no lo hagas, no quiero volver.
  • Ahora vuelvo, no te vayas, no borres la sonrisa de tu memoria.
  • Adiós.

Subir y bajar a rastras en un alambre que atraviesa mi pecho, cada noche más hundido en la almohada, abrazándote, sintiéndote más cerca, como si nada hubiera ocurrido. Otra vez vuelven a hacer efecto las pastillas, he despertado. Y todo es mucho más triste que los sueños. Ya no los controlo como antes. Estaba a gusto siempre que quería, y ya parece que tampoco ahí puedo hacer nada por vivir. Probé a vivir soñando, descansando del sueño por el día y olvidando todo durante la noche, pero nada es eterno, ni siquiera la locura.